El Brandjacking es un término cada vez más popular entre los profesionales del marketing y las empresas debido a su potencial para beneficiar a las compañías. El brandjacking consiste en tomar el control del nombre, la identidad y el posicionamiento de una marca para llamar más la atención de los clientes potenciales.
Puede hacerse de forma positiva, ayudando a reforzar los atributos positivos de la marca, o puede hacerse de forma negativa, dañando la reputación de una marca. Es importante que las empresas conozcan los pros y los contras potenciales del brandjacking para asegurarse de que su empresa utiliza este concepto de forma beneficiosa.
El término «brandjacking» fue acuñado por primera vez por John Bernoff en su libro «Groundswell: Ganar en un mundo transformado por las tecnologías sociales». Afirma que el brandjacking es «el proceso de tomar el control o la posesión de una marca de un modo no autorizado por la propia marca». Explica además que el brandjacking se suele hacer para obtener una ventaja o para utilizar la marca para llamar la atención de los medios de comunicación.
Beneficios del brandjacking
Uno de los principales beneficios del brandjacking es que permite a las empresas obtener más exposición de la que podrían conseguir por sí solas. Al aprovechar la reputación y el reconocimiento de una marca establecida, las empresas pueden conseguir más atención de los clientes y aumentar sus ventas.
Por ejemplo, si un hotel se asocia a una cadena hotelera emblemática, será más probable que los clientes consideren la posibilidad de alojarse en él por las connotaciones positivas que conlleva ese nombre.
El branding también puede ayudar a reforzar el posicionamiento de una marca asociándose a otra que pueda ser más reconocida que ella. Por ejemplo, un pequeño hotel boutique puede asociarse con una gran cadena hotelera establecida para llamar más la atención de los clientes potenciales.
Al asociarse a ambas, el hotel más pequeño puede beneficiarse de todos los atributos positivos asociados a la marca más grande y reconocida.
Pero el brandjacking no está exento de riesgos e inconvenientes. Por ejemplo, si la marca que está siendo «jacked» se asocia a sentimientos negativos, esto puede perjudicar tanto a la marca «jacker» como a la «jacketed».
Además, siempre existe la posibilidad de que las dos marcas choquen o de que la asociación no sea tomada positivamente por los clientes. En estos casos, la marca «jacker» puede acabar perdiendo clientes a favor de la marca «jacketed».
Para los hoteles, el brandjacking puede ser una herramienta eficaz para captar más atención de los clientes potenciales. Sin embargo, es importante que los hoteles sean estratégicos a la hora de utilizarlo. Los hoteles deben considerar el posicionamiento de su marca, los riesgos potenciales y el valor que aportará una asociación de marca.
Antes de hacer brandjacking, un hotel debe asegurarse de que su marca es conocida y bien reconocida entre los clientes potenciales. Esto ayudará a garantizar que los clientes reconozcan la asociación y comprendan lo que representa el hotel.
Una vez que un hotel ha identificado su marca objetivo, puede empezar a considerar las formas en que puede beneficiarse de la asociación.
Los hoteles pueden utilizar el brandjacking para aumentar su visibilidad aprovechando la fuerza del reconocimiento de la otra marca. También pueden utilizarlo para reforzar los atributos positivos asociados a la otra marca para impulsar la reputación de su propia marca.
Por ejemplo, si un hotel está asociado a una marca de viajes muy conocida, puede beneficiarse del reconocimiento y la confianza asociados a esa marca. Esto puede ayudar a los clientes a ver el hotel de forma más positiva y animarles a reservar su estancia en él.
Los hoteles también pueden utilizar el brandjacking como forma de diferenciar sus servicios de los de la competencia. Al asociar su hotel a una marca única e interesante, es más probable que los clientes elijan el hotel en lugar de otros de la zona.
Por último, los hoteles deben controlar siempre el proceso de brandjacking para asegurarse de que la asociación de marcas tiene el efecto deseado. Utilizando datos y métricas, los hoteles pueden medir el éxito de sus esfuerzos de brandjacking para asegurarse de que la iniciativa va según lo previsto.
El brandjacking puede ser una forma eficaz de que los hoteles obtengan más atención de los clientes potenciales. Sin embargo, es importante que los hoteles adopten un enfoque estratégico. Teniendo en cuenta los riesgos y las oportunidades, los hoteles pueden asegurarse de que obtienen el máximo beneficio de sus esfuerzos de asociación de marcas y de que su marca está bien posicionada para beneficiarse del reconocimiento añadido.