Es una tendencia cada vez más extensiva en muchos hoteles: incluir buffet libre tanto en desayuno como en comidas e incluso en cenas. Un incentivo que te puede diferenciar de la competencia y un efecto llamada interesante pero ¿cómo gestionar este punto para que te salga rentable? Contar con un software para hoteles también puede ayudarte.
Desde que a finales de los 40 se extendieran por diferentes establecimientos hoteleros en EEUU, el concepto de “buffet libre” ha terminado por generalizarse en buena parte del mundo al menos en lo que a desayuno se refiere. Es el típico “all you can eat” que podemos ver en centenares de restaurantes de todo tipo pero aplicado a nuestro hotel pero ¿es rentable introducirlo en nuestro establecimiento? La respuesta, indudablemente, es sí. Eso sí, siempre y cuando se tengan en cuenta las posibilidades de tu negocio y su tamaño. O lo que es lo mismo, si no tienes la cocina o el comedor apto para ello, mejor que no lo intentes. No vale la pena tener un pequeño buffet libre aunque sea de desayunos que puede repercutir y para mal la imagen de nuestro hotel en las principales páginas de reservas y foros.
Consejos para tener un buffet libre
Tener un buffet libre en tu hotel es un gran reclamo para acumular reservas que es lo que se trata pero también exige una serie de esfuerzos y consejos a tener en cuenta para que la situación no te sobrepase.
Por ejemplo contar con un software para hoteles como Hotelgest te ayudará a identificar las peculiaridades de cada cliente en cuanto a productos prohibidos por salud en su dieta cara a tener en cuenta el ofrecer otras alternativas para éstos.
Apunta estos consejos y gestiona de una manera más eficaz el buffet libre de tu hotel sin arruinarte.
– Date cuenta que sustituir el menú y la carta por buffet libre no tiene porqué ser más caro. Es normal que disminuyas algo la calidad de los alimentos pero la reconversión puede ser al 100%.
– Dependiendo de las opciones de tu hotel puedes tener, al menos, un buffet libre de desayunos (lo más fácil y que implica menos cocinado) y el resto, como siempre, a la carta pero al menos habrás introducido el concepto “buffet libre” que tanto llama la atención.
– Lleva a cabo una inteligente gestión de compras de los productos teniendo en cuenta puntos clave como la relación con los proveedores, el conocimiento del mercado en cuanto a precios y nuevos productos, controlar el rendimiento de productos (cuáles funcionan más y cuáles menos), controlar periódicamente los costes, comunicación constante con las necesidades y órdenes de la piscina…
– Opta por trucos tales como utilizar vajillas pequeñas e individuales para el autoservicio por parte de los clientes; porciones de carne y pescado de máximo 70 gramos y que en las planchas o en los fuegos sean los cocineros quienes sirvan a los clientes. También puedes optar por el buffet a la carta.
Siguiendo estos pasos podrás tener un servicio de buffet de comida en tu hotel totalmente asumible.